La Copa de S.M. el Rey ha concluido para el Málaga mientras que para el conjunto almeriense no ha hecho mas que empezar. Un partido que parecía no querer ser ganado por ningún equipo teniendo en cuenta lo duradera que es la segunda división.
El partido arrancó sin mensajes claros de ambos equipos, puesto que parecía que nadie quisiera pasar de ronda.
Justo antes de que el árbitro señalara el fin del primer tiempo, Hicham se coló en el área visitante y, sin haber penalti, cayo al suelo. El marroquí se tiró, el árbitro pitó y Héctor marcó.
Ya en la segunda mitad, otra jugada dudosa, esta vez en el área costasoleña, iba a ser sancionada con otro penalti, esta vez a favor de los rojiblancos. Sekou lanzó el penalti, Pawel Kieszek sacó una mano milagrosa. Sin embargo, para la desgracia malaguista, el rechaze le cayó al africano, quién sin oposición la empujó a la red.
La remontada se consumó con el gol de Adri Montoro, quién remató un buen centro raso de Luis Rioja. Nada pudo hacer Kieszek ante tal barullo de piernas locales y visitantes.
El partido agonizaba con un Almería que no quería que se jugase al fútbol, a pesar de que no propuso nada el equipo blanquiazul. El Almería avanza en la Copa, el Málaga se “estrella intencionadamente”.