La Rosaleda volvió a albergar un derbi andaluz entre Málaga y Córdoba. Dos clubes que se vieron las caras en segunda división, algo extraño a sabiendas de la condición histórica de ambos equipos.
El partido arrancó a las 18:00, una hora complicada teniendo en cuenta el calor que suele haber en la capital de la Costa del Sol. Las ocasiones eran a favor de los locales, la posesión, de los visitantes.
El primer gol llegaría en el minuto 15′, con un saque de banda larguísimo de Luis Hernández, Blanco Leschuck la peinó y Adrián remató de cabeza pillando a Carlos Abad a contrapié. Era el principio de la mayor alegría blanquiazul hasta el momento.
Ya en el 39′, Harper, con un doble recorte en el lateral del área, sacó un centro para el remate de Blanco Leschuck. Carlos Abad paró a bocajarro el cabezazo del argentino, pero para desgracia visitante, el balón fue favorable para que Hicham la empujara con la cabeza al fondo de la portería.
Ya en la segunda mitad, el Córdoba intentó algo distinto a lo visto en los primeros 45 minutos, sin embargo, no consiguieron inquietar a Munir.
Pero el Málaga buscaba la sentencia. Una falta sacada por Ontiveros no encontró rematador aéreo, pero, cuando cayó sobre el césped, Ricca la enganchó e hizo el tercer y último gol del partido.
El Málaga sigue de pleno, pues ha logrado quince puntos de quince posibles. Inmejorable estreno para los de López Muñiz, los que la semana que viene se verán las caras frente a la UD Las Palmas, el que posiblemente sea uno de los partidos a seguir en la categoría de plata.
Mientras tanto, el Córdoba sigue sin ganar y preocupa la falta de creación, ya que el cuadro califal no consigue la contundencia más que necesaria para LaLiga 1|2|3. Los blanquiverdes se enfrentarán al CD Tenerife en el Nuevo Arcángel dentro de seis días, encuentro en el que la afición aguardará expectante por la primera victoria, esta vez en casa.